Por EFE
El paso de CR7 por el cuadro ‘Bianconero’ no fue tan excelente como se pensaba
El portugués Cristiano Ronaldo y la Juventus separaron sus caminos después de tres temporadas marcadas por seis títulos y muchos récords, pero manchadas por el fracaso en la Champions League, así como por el poco cariño existente entre el jugador y el entorno del club.
El regreso de Cristiano Ronaldo al Manchester United, el club en el que ganó su primer Balón de Oro y su primer título de Champions League es el nuevo e inesperado capítulo de un mercado de fichajes ya histórico este año con los traspasos de Lionel Messi al Paris Saint-Germain, después de una vida en el Barcelona, y Romelu Lukaku al Chelsea.
Dos ‘Scudetti’ (título de la Serie A), una Coppa Italia, dos Supercopas italianas, un título de máximo artillero liguero fueron los trofeos conquistados por Cristiano en la Juventus, en una etapa en la que le faltó el gran objetivo de poner fin a la obsesión del club turinés por levantar la Champions League.
CR7, quien tenía todavía un año de contrato con la Juventus, con un sueldo neto de 31 millones de euros, dejó el club con un balance de 101 goles en 134 partidos y su último encuentro lo disputó el pasado 21 de agosto, en un empate 2-2 en el campo del Udinese, en el que el VAR le anuló el gol de la posible victoria de último minuto.
Tras acabar la temporada pasada con un título de la Supercopa y una Coppa Italia, Cristiano tomó la decisión de salir de la Juventus, en la que ya no se sentía cómodo. CR7 veía una plantilla poco competitiva a nivel europeo y echaba de menos volver a ser absoluto protagonista en Europa.
Pese a que la directiva ‘Bianconera’ asegurara repetidamente los últimos meses que Cristiano se quedaría "absolutamente" en la Juventus, en el espacio de pocas horas, se concretó una salida histórica.
Cristiano Ronaldo eligió al Manchester United, el club en el que empezó a forjar su leyenda, para recuperar el cetro de rey de Europa.
Su paso por la Juventus llega a su fin avalado por los títulos, pero no por el amor puro que marcó su etapa en Inglaterra y los gloriosos nueve años con el Real Madrid.