A lo largo de su vida, Noah Lyles ha superado varios obstáculos. El más complicado quizá fue enfrentarse al asma desde pequeño. La enfermedad no le permitió desempeñarse al máximo en sus actividades deportivas, pero poco a poco fue venciendo el impedimento.Así, después de probar en la gimnasia y otros deportes, el originario de Gainesville, Florida, se presentó en los Juegos Olímpicos de París 2024 y ganó la medalla de oro en los 100 metros planos en una competencia que será recordada como la más pareja de la historia. Noah Lyles el rey de la velocidad en París 2024 De niño, Lyles venció una dura etapa de largos periodos en el hospital y ya como adulto, supo vencer a la depresión y se convirtió en un bastión para la lucha en pro de la salud mental de los deportistas.Este domingo venció a sus contrincantes en la pista, pero definitivamente, después de lo que logró en su vida, una competencia deportiva, aún en el escenario más grande, no representó para nada un impedimento.