Lo que parecía una victoria cómoda se complicó al final y en los últimos segundos estuvo a punto de escaparse de las manos. Sin embargo, lo hecho durante el partido le dio a los San Francisco 49ers el triunfo 23-17 sobre los Dallas Cowboys.

Cierto, el equipo de la estrella solitaria peleó hasta el último momento y buscó ganar el juego. Sin embargo, los errores cometidos durante los cuatro periodos, sumado a los 14 castigos que los fueron hundiendo poco a poco.

Con todo y las 254 yardas por aire, 27 por tierra y un touchdown por cada una de estas vías, Dak Prescott no pudo erigirse como el líder que sacara a los Cowboys del atolladero y pudiera llevarlos a los playoffs divisionales.

Ezekiel Elliott pareció jamás haber entrado y salvo una recepción de touchdown de Amari Cooper, la ofensiva de Dallas jamás se supo asentar. Y si creció un poco al final fue por las lesiones de Nick Bosa y Fred Warner.

Caso contrario con los 49ers, que con Elijah Mitchell y Deebo Samuel arrollaron a la defensiva de Dallas. Jimmy Garoppolo, aunque fue interceptado en una ocasión y se fue sin pases de TD logró darle fluidez al ataque terrestre de su equipo.

Los 49ers siguen en gran momento y ahora sus rivales serán los Green Bay Packers en Lambeau Field, con quienes tienen cuentas pendientes después del partido tan cerrado que les sacaron en temporada regular.