Por Hiram Marín
El escándalo de robo de señales sigue provocando repudio por parte de los aficionados
Los Houston Astros se coronaron campeones de la Serie Mundial en 2017, lamentablemente, el triunfo se vio empañado por el robo de señales, operado por directivos y coaches del equipo de la 'ciudad espacial' con un impresionante sistema de video y software.
El castigo llegó, pero todo quedó en una multa y en algunos despidos, a los Astros no se les quitó el título y el cinismo por parte de algunos miembros del equipo de Houston molestó sobremanera a aficionados y jugadores contrarios.
Las sanciones se dieron a conocer a finales de 2019, pero la pandemia de COVID-19 evitó que los fans estuvieran en los parques en 2020, por lo que fue hasta 2021 cuando pudieron demostrar su coraje hacia los Astros.
Así, desde el primer partido comenzaron los pelotazos hacia los jugadores y en las tribunas en las que los Astros han sido visitantes, los abucheos y las pancartas ofensivas no han faltado. Este es el 'Boo Tour' y al parecer nadie lo va a parar.