Por Héctor Cantú
Los números del Rebaño son intolerables
Las Chivas del Guadalajara siguen viviendo una auténtica pesadilla y ya están colocados en una posición comprometida de cara a la definición de la postemporada en el torneo Clausura 2011.
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Su nuevo verdugo fue el superlíder de la competición, el Cruz Azul, equipo que está en total ascenso y que, contrario a Chivas, ha demostrado solidez en su proyecto deportivo.
El Rebaño es un desastre. Una auténtica pachanga y los números revelan la falta de comunión que hay entre directiva, cuerpo técnico y jugadores.
Con la plantilla que tiene el equipo resulta intolerable ver al Chiverío colocado en la posición número 15, soportado, solo por Necaxa, FC Juárez y Atlético San Luis, tres equipos que están muy por debajo en cuestión de presupuestos, del cuadro tapatío.
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Más allá de los 13 puntos que tiene Chivas en la bolsa, la parte preocupante apunta a la racha negativa que tiene el equipo de Víctor Manuel Vucetich.
En total son ocho partidos consecutivos sin poder conseguir una victoria, un número deplorable que solo es igualado por Pachuca, que acumuló 9 juegos sin victoria desde que arrancó el torneo.
Chivas tiene un vestidor partido. No hay una idea clara de juego y hay una ausencia de disciplina que tienen al equipo hundido después de 14 fechas.
Víctor Manuel Vucetich tiene las maletas hechas y ha sido honesto al aceptar que no ha sido un buen torneo para El Rebaño. La directiva tiene la última palabra con 13 puntos por disputarse.
Aunque las matemáticas aún le dan posibilidades a Chivas para poder colarse a la Fiesta Grande, la realidad pinta diferente. Este equipo, está condenado al fracaso.