Pumas cayó con la cara al sol en las semifinales ante Atlas. El equipo de Andrés Lillini incluso estuvo cerca de hacer la hombrada y lograr el resultado esperado que los hubiera catapultado al partido por el título.

Una jugada terminó por llevarse los reflectores en los minutos finales. Juan Dinneno fue golpeado en la nariz cuando buscaba un balón por lo alto, una acción que pudo haber sido sancionada como penal.

La agresión le destrozó la nariz al delantero, quien después del partido mostró las huellas de la batalla.

A través de sus redes sociales, el goleador universitario mostró la nariz totalmente chueca y los puntos de sutura que debió recibir luego del codazo.

Aunque Andrés Lillini se negó a tildar la actuación arbitral como un “robo” para Pumas, la realidad es que la jugada que pudo haber cambiado la historia del partido, manchó el resultado y el boleto de Atlas, que volverá a jugar un partido por el título dos décadas después.