Por Héctor Cantú
Los culés aprovecharon el traspié del acérrimo rival y sumaron 3 puntos más
El Barcelona dormirá tranquilo esta noche luego de saber que ha hecho los deberes de forma oportuna luego de vencer al Sevilla, en casa, por 3-0.
Los comandados por Xavi Hernández necesitaban anotarse una victoria que les permitiera sumar tres unidades más, para sacarle una distancia de 8 puntos al Real Madrid que cayó, en la misma jornada, con el Mallorca.
El cuadro hispalense no le puso las cosas sencillas a la ‘Xavineta’ con un aparato ultradefensivo que obligó al Barcelona a emplearse a fondo y desplegar el juego de toque preciso y constante que le caracteriza, para demoler ese candado.
Bastó el primer gol para que las cosas cambiaran sobre el Camp Nou. El gol de Jordi Alba, el capitán del equipo permitió darle serenidad al equipo culé que había trabajado constantemente en el duelo para conseguir el objetivo.
Fue una jugada perfecta y precisa la que dejó a Jordi frente al arco por el costado izquierdo. El internacional español solo necesitó poner el botín para romper el 0-0 en el tanteador.
Doce minutos después del primer sablazo llegó el segundo. En esta ocasión fue el juvenil Gavi, quien sigue creciendo como la espuma con el equipo para finiquitar una jugada perfecta que tuvo la incursión, previa, de Raphina.
Con la moral por los suelos y el equipo totalmente desarmado sobre el terreno de juego, el Barcelona encontró más espacios para finiquitar la historia. Nueve minutos después apareció Raphina, para ponerle la cereza al pastel a una jugada cargada del ADN barcelonista. El Brasileño empujó la pelota al fondo luego de un pase de Jordi Alba, quien firmó así uno de sus mejores partidos con el equipo de las últimas semanas.
Este resultado le permite a Xavi Hernández llegar a 53 puntos, y alcanzar las 7 victorias consecutivas después de aquel empate en tiempo regular con el Betis en las semifinales de la Supercopa de España.