Por Héctor Cantú
El 10 del Barcelona tuvo una actuación discreta ante el Real Madrid
El primer Clásico de España en la temporada 2021-2022 marcó el fin de una era marcada por la presencia de dos íconos del futbol: Lionel Messi y Sergio Ramos, quienes después de 16 temporadas consecutivas, no vieron actividad en este encuentro que terminó con la victoria de los merengues por 2-1 ante los culés.
Ansu Fati, el nuevo 10 del Barcelona, no pudo ser el heredero de Leo futbolísticamente hablando. Ante el Real Madrid tuvo un partido discreto, marcado por su falta de ritmo físico, que lo obligó a ser sustituido a 16 minutos del final del partido.
Dolor y desilusión absoluta en el Barcelona
El juvenil, quien está llamado a ser el referente futuro del club, solo consiguió tres disparos al arco rival, uno de ellos con dirección al arco.
Fue tanta la presión que ejercieron Eder Militao y Lucas Vásquez sobre él que lo obligaron a solo completar el 84 por ciento de los pases que intentó.
La opción más clara de gol la tuvo dentro del área ya que el Barcelona estaba abajo en el tanteador. Pero su disparo, después de un recorte magistral, terminó estrellado en los pies de David Alaba, el jugador más destacado del partido y líder del Real Madrid en la defensa.
Debut amargo para Sergio Kun Agüero como goleador
Fue Sergio Agüero el encargado de sustituir a Ansu Fati, quien en los últimos suspiros del partido logró recortar distancias en el tanteador para dejar el marcador final en un 2-1 doloroso para la causa blaugrana que quedó hundido en la octava posición de la clasificación general.
Ansu, quien nunca ha completado los 90 minutos cuando enfrenta al Real Madrid, se mantiene con un solo gol marcado ante los merengues, cifra que no lo coloca como un futbolista determinante para las causas blaugranas.