Por EFE
Protagonizó la goleada sobre Sudráfrica
Kylian Mbappé no pierde una ocasión de marcar la historia y este martes dio un paso más al liderar la victoria de la selección francesa contra Sudáfrica (5-0) en un amistoso disputado 12 años después de que los "Bafana Bafana" humillaran en el Mundial que se celebró en su país a los "bleus".
Cierto que la magnitud del partido nada tenía que ver con la que certificó el desastre galo en Sudáfrica, y que el rival, desde entonces, ha venido a menos, pero eso no restó ni un ápice a la implicación del todavía jugador del París Saint-Germain.
Con un golazo de museo abrió el marcador y con su energía en el terreno, bien secundado por un activo Antoine Griezmann, contribuyó a la buena imagen que Francia, plagada de suplentes, dejó en su segundo amistoso en cuatro días.
Francia 'limpia' el mal recuerdo ante Sudáfrica
A diferencia del partido contra Costa de Marfil, donde los africanos merecieron mejor suerte, Sudáfrica actuó de figurante ante una campeona del mundo que ha mantenido la fortaleza que le lleva a encadenar ya 20 partidos sin derrota.
Si hace cuatro días Mbappé estaba ausente por una enfermedad respiratoria, en esta ocasión demostró que su liderazgo es natural allí donde pone el pie y dejó otra lección de implicación y talento.
Con un soberbio toque desde la esquina del área, que describió una parábola casi imposible, encontró la escuadra sudafricana a los 25 minutos y encadenó cinco partidos internacionales como goleador.