Por Héctor Cantú
El equipo culé no pudo salir con una ventaja de casa y se jugará la vida en Old Trafford
El Barcelona rescató un partido que por momentos tuvo perdido y alargó a 17 juegos su racha invicta en todas las competiciones ante un Manchester United que salió respondón en el Camp Nou.
El equipo de Xavi Hernández pagó muy caro el haberse perdido en un lapso importante del partido. No supo mantener la ventaja lograda y tuvo que venir de atrás para rescatar un empate que deja la eliminatoria en la Europa League más que abierta.
Marcos Alonso y un gol con dedicatoria celestial
La defensa culé no fue la de partidos anteriores. Tuvo lapsos de mucho desorden y desconcentración que pagaron muy caro. Una situación que molestó severamente a Xavi Hernández que ahora tendrá que hacer un planteamiento mucho más sólido para el partido de vuelta.
Marcos Alonso fue el encargado de romper con el empate después de un primer tiempo cerrado y con pocas llegadas de peligro frente a los arcos. Su remate de cabeza terminó colándose en el arco de De Gea, quien no pudo cubrir su poste de manera correcta para impedir la caída de su arco.
Pero el gol, más allá de generar un ambiente de estabilidad en el Barcelona, ocasionó una parsimonia innecesaria. Dos desatenciones consecutivas se tradujeron en goles en contra que complicaron el panorama.
Marcus Rashford, el orquestador que silenció al Camp Nou
Primero, una falla en la salida que dejó a Marcus Rashford frente al arco para definir al primer poste de Marc André Ter Stegen.
Después, una jugada de tiro de esquina, ejecutada perfectamente por el propio Rashford, llegó el segundo tanto del United con un autogol. Joules Koundé empujó con el pecho la pelota al fondo de las redes para obligar al Barcelona a remar contracorriente.
Xavi Hernández manejó sus piezas y encontró el gol del empate con un tiro-centro de Raphina que no encontró los pies de Robert Lewandowski, pero que sí se anidó en el fondo de las redes para poner cifras definitivas al encuentro.
En los últimos 15 minutos, el Barcelona fue una máquina ofensiva, generando varias opciones de gol que estuvieron cerca de entrar al arco rival.
El trabajo arbitral quedó señalado una vez más luego de no mostrar una tarjeta roja en el momento adecuado y no revisar una mano dentro del área que ni siquiera fue juzgada por el VAR.
Barcelona y Manchester United definirán al ganador de la eliminatoria la próxima semana en Old Trafford.