Marko Arnautovic tuvo que salir a disculparse por la incendiaria celebración que protagonizó, luego de que marcara el tercer y definitivo gol en la victoria de 3-1 de Austria sobre Macedonia del Norte.

Luego de ser señalado de proferir insultos racistas y acompañarlos con señas, el futbolista se deslindó de las acusaciones y, por el contrario, se autonombró un defensor de la diversidad.

Austria y la primera victoria de su historia en una Eurocopa

“Hubo algunas palabras negativas ayer por la emoción del juego. Quisiera disculparme, en especial con mis amigos de Macedonia del Norte y Albania. Quisiera decirlo claramente: ¡No soy racista! Tengo amigos en casi todos los países y apoyo la diversidad. Quienes me conocen pueden dar fe de ello”, escribió en una historia en su red social Instagram.

Arnautovic se habría referido al defensa macedonio, Egzon Bejtulai como “Sipatarsku”, una forma peyorativa de llamar a los albanos, además de haberlo insultado con referencias a su madre. Los dichos harían sido acompañados con una seña que presumiblemente, habría significado “poder blanco”.

Incendiaria la celebración de Marko Arnautovic

Los actos de Arnautovic habrían llevado al capitán de Austria, David Alaba, a tranquilizarlo al intentar cerrarle la boca.

Hasta el momento, la UEFA no se ha pronunciado acerca del comportamiento de Marko Arnautovic.