Por Hiram Marín
La albiceleste borró del campo a la 'garra charrúa' en el Clásico del Río de la Plata
Se esperaba mucho más de ambos, pero Argentina lo hizo mejor, lució con más hambre y ganó de manera merecida el Clásico del Río de la Plata. El gol de Guido Rodríguez fue suficiente para el 1-0 final.
No hay que engañarse, no fue un partido brillante, la albiceleste hizo lo necesario, pero después del gol pareció renunciar al ataque y defendió la ventaja como joya preciada.
¿Qué pasa con una Selección que tiene a dos de los delanteros más letales del mundo y suma más de 370 minutos sin gol? Luis Suárez y Edinson Cavani auténticamente desaparecieron.
Ninguno de los dos 'killers' charrúas estuvo a la altura, pero tampoco en medio campo, los celestes parecían dormidos, sin ánimos y eso se dio desde el primero hasta el último minuto.
Esto contrastó con el gran trabajo de Argentina en el medio campo, sobre todo con Rodrigo de Paul, el del Udinese fue la bujía que necesitaba el equipo de Scaloni y combinado con Acuña y Messi mantuvieron el resultado.
En los minutos finales hubo ciertos intentos uruguayos, pero todos eran frenados por el excelso trabajo defensivo de los argentinos, que necesitaban ganar y a quienes estos tres puntos aliviaron sin duda.