Por Héctor Cantú
El club volvió a dar la cara en la Serie A antes del duelo en Champions League
El Napoli ha dejado muy en claro el mensaje que le quiere hacer llegar al Barcelona de España, su rival en octavos de final de la UEFA Champions League.
El equipo italiano, que atravesó hace días una crisis que derivó en la destitución del técnico Walter Mazzarri justo horas antes de enfrentar el juego de ida ante el Barcelona, ha venido de menos a más y muestra que mete severa preocupación al equipo de Xavi Hernández.
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Ahora, comandados por Francesco Calzona, el equipo napolitano no ha perdido desde que asumió como técnico del equipo celeste. Incluso, los italianos han conseguido dos victorias por demás valiosas, la primera por goleada de 6-1 al Sassuolo y la segunda, ante la Juventus de Turín, segundo clasificado en Serie A.
La mejor noticia para los Azzurri es que se han reencontrado con una mecánica del gol que incluso pusieron en práctica contra el propio Barcelona, al que le sacaron el empate 1-1 en los primeros 90 minutos de la eliminatoria.
Los dos referentes del vigente campeón en Italia, Khvicha Kvaratskhelia y Victor Osimhen, autor del gol del empate en el primer partido, han recuperado el olfato goleador en el momento más oportuno, sumando elementos que ponen en peligro los planes del Barcelona de avanzar a los cuartos de final.
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El cuadro catalán desperdició una oportunidad de oro de colocarse en la segunda posición en la clasificación española luego de haber empatado 1-1 ante el Athletic Club, justo en la misma jornada donde el Real Madrid también dividió unidades y el Girona fue superado por el RCD Mallorca.