Por Héctor Cantú
Liverpool gana su primer partido al Atlético de Madrid en suelo español
El Atlético de Madrid y el Liverpool brindaron un espectáculo excelso en la cuarta jornada de la fase de grupos de la UEFA Champions League en un episodio que terminó a favor de los visitantes por 3-2 en un partido de altas emociones.
El equipo de Diego Simeone, que por un momento tuvo un empate con sabor a victoria en la bolsa, se desplomó en los minutos finales y con un error de Mario Hermoso dejó sobre la mesa de los comensales los tres puntos que se agenció el equipo visitante.
El Wanda Metropolitano fue un hervidero de emociones, pasando de la incredulidad a la euforia en menos de 20 minutos y de la felicidad a la desilusión en los minutos finales del cotejo.
Los de rojo y blanco salieron dormidos al cotejo. Cometieron errores de atención en la defensa que permitieron al Liverpool ponerse arriba en el tanteador. Primero con un gol de Mohamed Salah y después con un tanto descomunal de Naby Keïta que generó un silencio sepulcral en el inmueble del Río Manzanares.
Pero el Atlético nunca tiró la toalla. Contrario a lo esperado, mejoró su nivel de juego y terminó por secar las ideas de los ingleses que por un largo periodo del partido, desaparecieron del terreno de juego.
Así se generó el show de Antoine Griezmann, quien volvió a protagonizar una noche fantástica con el cuadro colchonero que hizo que su nombre resonara en cada esquina del Metropolitano.
Primero con un desvío y después, con una definición apresurada que lo obligó a ir al césped para tocar la pelota en el último suspiro de la jugada antes de mecer las redes.
Con el envión anímico a su favor, el Atlético buscó enterrar al equipo visitante que vistió de amarillo y sumar así la tercera victoria de forma consecutiva ante el Liverpool.
Pero los planes de Simeone y sus pupilos quedaron enterrados con la expulsión de Antonine Griezmann. El francés levantó demás la pierna y terminó golpeando el rostro de Firmino para ver terminada su participación antes de lo esperado en una noche mágica que él mismo rubricó.
Cuando todo parecía que el resultado terminaría en un empate salomónico, llegó el yerro inexplicable de Mario Hermoso, quien se desentendió de la pelota en su intención de cubrir su zona para atropellar dentro del área al delantero rival.
Mohamed Salah no desaprovechó la oportunidad para marcar su segundo tanto de la noche y encaminar al Liverpool a su primera victoria en suelo español ante el Atlético de Madrid.
Con este resultado, las posiciones en el sector B no cambiaron. Liverpool se mantiene como líder del sector con paso perfecto, mientras que Atlético de Madrid quedó ubicado en la segunda posición con el mismo número de puntos que el Porto que le pisa los talones.
En la siguiente ronda de la fase de grupos, ambos equipos volverán a verse las caras con el deseo de los colchoneros de cobrar venganza inmediata en el asalto de Anfield.