El Consejo Mundial de Boxeo ha determinado que la pelea entre Deontay Wilder y Tyson Fury, celebrada a inicios de octubre, fue la mejor del año que está por terminar.

Tyson Fury y Deontay Wilder chocaron por tercera ocasión en sus carreras e hicieron así válida la opción de revancha que se había firmado en los contratos de la segunda batalla donde Fury también salió con la mano en alto.

Por segunda ocasión consecutiva, ‘Gypsy King’ no permitió que Deontay Wilder llevara la pelea hasta las tarjetas y acabó con él por la vía del cloroformo a pesar de que previamente había visitado la lona.

La pelea, que esperó más de 12 meses para que se celebrara en el T-Mobile Arena de Las Vegas, Nevada, resultó ser uno de los mejores espectáculos boxísticos del año y el mejor, a ojos del CMB.