Por Héctor Cantú
El tijuanense se declara listo para la guerra a poco más de una semana del pleito
Jaime Munguía tiene una cita con la historia el próximo 4 de mayo, cuando enfrente a Saúl ‘Canelo’ Álvarez en una batalla que está llamada a ser una de las más importantes del año y en la que estará en juego el título indiscutido de la división de los supermedianos.
Para Munguía es un sueño hecho realidad el poder pelear con Saúl Álvarez, sobre todo a petición del mismo tapatío que no encontraba un rival a su estatura para la acostumbrada pelea que sostiene en mayo de cada año.
Por ello es que Munguía ha trabajado a tope en el gimnasio y a poco más de una semana se declara listo para la guerra que librará ante uno de los boxeadores actuales que está llamado a ser parte del Salón de la Fama.
“Cuando me enteré de que esta pelea sucedería, me entusiasmé ya que sé lo grande que es esta oportunidad. Quiero que todos sepan que estoy 100% listo para esta pelea.Yo siempre mantuve un ojo puesto en Canelo, aun cuando ambos pertenecíamos a divisiones distintas. Eventualmente, uno debe enfrentarse al mejor de su división. Eso es lo que haremos ahora”, detalló en la ultima sesión de entrenamiento abierta que sostuvo ante varios medios de comunicación.
Bajo la tutela de un histórico como Freddie Roach, Jaime Munguía tiene la confianza de poder hacer una pelea única que le permita lograr el anhelado sueño de arrebatarle los cinturones a Saúl Álvarez.
“El campamento de entrenamiento ha sido muy bueno. El mejor de mi carrera hasta ahora, sin dudas. Trabajar junto a un entrenador legendario como Freddie Roach me ha motivado muchísimo. Él me mantiene con la confianza en alto y me ha ayudado muchísimo. Entrenarme junto a Freddie ha sido fenomenal, y él le brinda mucha paz y tranquilidad a mi esquina. Él es un entrenador sabio y experimentado”, agregó.
Aunque es innegable la admiración que siente por Saúl y su trayectoria, Jaime Munguía también es claro al declarar que su próximo rival no le impone, no le preocupa y mucho menos le genera sensaciones negativas. Él tiene listas las armas para esta guerra que hará historia.