SELECCIÓN MEXICANA
"Exigían un cambio generacional y aquí está": Edson Álvarez pide paciencia
Por Enrique Gómez
El 'Machín' ve la Copa Oro como una revancha personal, no contra Estados Unidos
El cambio generacional en la Selección Mexicana ha sido mucho más difícil de lo que se esperaba. Quizá los jugadores actuales no sean tan buenos como los de otros años, pero Edson Álvarez pide paciencia.
Previo al duelo ante Panamá en la Liga de Naciones de CONCACAF, el cual parece más un castigo para el equipo ‘azteca’ por estar obligado a jugar un partido de consolación con la moral deshecha tras la derrota estrepitosa ante Estados Unidos en semifinales, el mediocampista defensivo del Tri reflexionó que esta renovación en la plantilla, así como estos primeros resultados, son un proceso natural.
“Muchas veces exigíamos un cambio de generacional, aquí lo tienen. No pido que nos apoyen a los que ya llevamos tiempo, pero sí que se tenga paciencia con los jóvenes que apenas comienzan. Entender que estamos iniciando un nuevo proceso, en algún momento tenía que pasar, no podíamos quedarnos con lo mismo. Hay que tener mucha paciencia, hay que tener calma”, comentó el ‘Machín’ ante los medios.
Edson dio uno de sus peores partidos con la Selección Mexicana en la derrota 3-0 ante Estados Unidos (en realidad la mayoría de los jugadores tuvo un rendimiento individual desastroso), pero aseguró que la vida y el futbol dan muchas vueltas y la Copa Oro será vista como una revancha personal.
“Cuando uno comete un error aprende de ello y uno analiza, reflexiona, qué fue lo que pasó y qué pudiste haber hecho mejor, pero es parte de la vida y hay que seguir adelante, nosotros lo vemos de esa manera, ya pasó y tenemos que pensar en Panamá y en la Copa Oro que se viene, no sé si verlo como una revancha contra ellos, pero si una revancha con nosotros mismos”, afirmó el jugador del Ajax.
Desquitarse con Estados Unidos parece imposible a estas alturas, pues ya quedó más que claro que México está un escalón por debajo de su archirrival, pero al menos el equipo puede recuperar el amor propio en los próximos partidos, incluso en el infame juego por el tercer lugar ante Panamá.