Por Karla Villegas Gama
La pregunta que todo mundo se hace, tiene una respuesta válida
Desde hace varios años el Paris Saint-Germain ha estado ‘en el ojo del huracán’ por el manejo de sus finanzas: fichajes de primer nivel, que a la postre traen salarios altos. Esta situación ha generado, en repetidas ocasiones, una pregunta: ¿Por qué el Fair Play financiero (FPF) no interviene?
Quizá sea este mercado de fichajes el que más dudas haya generado, pues el PSG ha hecho cinco contrataciones que cualquier equipo desearía: Georginio Wijnaldum, Achraf Hakimi, Sergio Ramos, Gianluigi Donnarumma y Lionel Messi.
¿Cómo es posible que los parisinos se hayan hecho con los servicios de estos jugadores?, ¿por qué ellos sí pueden tener a Messi y Barcelona no? Vamos por partes.
¿El mejor mercado de fichajes de la historia? PSG y el caso de los agentes libres
Lo primero que hay que establecer es que el FPF funciona de forma distinta en cada liga. Si bien es cierto que la UEFA tiene sus lineamientos, también los directivos de los torneos locales hacen ajustes año con año.
La pandemia de la COVID-19 trajo consigo un duro golpe económico que puso en jaque a prácticamente todos los clubes del mundo, por ello, el órgano rector del futbol europeo decidió relajar las reglas del FPF, abriéndole una puerta a los equipos cuyo capital no se ha visto tan mermado.
A ello se suma el Fair Play financiero francés, el cual también ha cambiado sus normas hasta 2023. Entonces, el PSG tiene una especie de “doble permiso” para fichar y cuadrar sus cuentas.
Respecto al Barcelona, la situación con el tope salarial que tanto mencionó el presidente Joan Laporta obedece a reglas específicas de La Liga, es decir, nada tiene que ver lo establecido por la UEFA.
Joan Laporta da la cara y explica la verdad del ‘Caso Messi’
El cuadro ‘culé’ ya pasaba por momentos difíciles y cortar a Messi no era una decisión financiera sana ni a corto plazo, ni a largo plazo. Laporta fue claro al decir que su masa salarial rebasaba el 100% permitido.
Así pues, la rebaja salarial del 50% que habían pactado ambas partes no era una solución en absoluto para el Barça, ya que el club quedaba comprometido tanto financiera como deportivamente hablando.
Recuperarse del pago salarial habría tomado varios años, préstamos a bancos y más. Mientras que en lo futbolístico implicaba vender a jugadores cuando la demanda está a la baja.
Los elementos que el cuadro ‘Blaugrana’ ponía sobre la mesa cuentan con salarios altos: Philippe Coutinho, Antoine Griezmann, Samuel Umtiti; lo cual significa que el equipo que los quiera entre sus filas heredará su sueldo y eso podría implicar una deuda en el peor momento.
En resumidas cuentas, Messi llegó al PSG porque el Fair Play financiero de la Ligue 1 permite, de momento, que sus clubes excedan el límite salarial. En 2023, cuando se reactive el FPF, el contrato del argentino estará por terminar y, seguramente, muchos jugadores del cuadro parisino habrán dejado la entidad.
En todo caso, al equipo del jeque Nasser Al-Khelaïfi le restan dos años ‘de gracia’.